La receta que os presento la he sacado de un blog muy interesante, "Ana en la cocina", y desde el primer momento atrajo mi atención. Es ideal para una comida en el campo o una cena fría, porque la podemos tener preparada con antelación y, a la hora de servirla, no hace falta fuego. Es una buena opción para los bocadillos (por ejemplo con un poco de mayonesa, tomate y lechuga), para elaborar montaditos o unos pinchos.
Es muy fácil de preparar y lo podemos congelar y consumir en el momento que nos apetezca.
Ingredientes:
Es muy fácil de preparar y lo podemos congelar y consumir en el momento que nos apetezca.
Ingredientes:
- 500 g de pechuga de pollo sin piel.
- 100 g de queso manchego tierno.
- 100 g de bacon ahumado sin piel.
- 2 huevos frescos.
- 2 trufas negras cortadas en pedazos.
- 8 o 10 aceitunas rellenas.
- 2 tiras gruesas de jamón york, también llamado jamón dulce o jamón cocido.
- 1 huevo cocido.
- Sal y pimienta.
Realización:
1º.- Cortamos las pechugas en pedazos grandes y las salpimentamos.
2º.- Las colocamos en la picadora.
3º.- Añadimos el queso y el bacon cortados en pedazos.
4º.- Picamos todo hasta que quede bien triturado.
5º.- Ponemos la masa en un bol, le añadimos los dos huevos frescos y salamos ligeramente.
6º.- Removemos todo bien hasta que esté todo bien mezclado.
7º.- Forramos un molde con papel de film (para que quede bien adherido y se extienda bien, se puede untar con un poquito de mantequilla).
8º.- Echamos una primera capa de masa dentro del molde, la extendemos e igualamos.
9º.- Colocamos una tira de jamón york y las aceitunas formando una fila.
10º.- Cubrimos con otra capa de masa.
11º.- Ponemos el huevo duro cortado en cuartos, los pedazos de trufa y otra tira de jamón york.
12º.- Cubrimos con otra capa de masa. La extendemos e igualamos.
13º.- Cubrimos todo con el film sobrante de los bordes del molde y presionamos ligeramente con la palma de la mano.
14º.- Precalentamos el horno a 180 ºC. Cubrimos todo el molde con papel de aluminio y lo metemos en un recipiente con agua para que cueza al baño María durante unos 45 minutos (para saber si ya está, un truco es clavar un palillo en el centro y al sacarlo deberá salir limpio).
15º.- Sacamos todo del horno con cuidado de no quemarnos, extraemos el molde del agua y lo dejamos enfriar. Una vez frío, lo metemos en la nevera hasta el día siguiente.
16º.- Lo desmoldamos, lo cortamos a nuestro gusto y lo servimos.
Variaciones y sugerencias:
- Para este fiambre también es ideal la carne de pavo, o incluso lomo de cerdo.
- El relleno lo podemos variar, por ejemplo, poner esparragos trigueros (ligeramente salteados), champiñones, zanahoria, etc.
- También podemos poner pistachos pelados, pero debemos tener en cuenta que luego será más difícil a la hora de partirlo.
- Los podemos servir en rebanadas de pan con un poco de mayonesa y con un toque de mostaza, o sobre pan ligeramente tostado con un chorrito de aceite de oliva.
Uhmmm parece fácil y sabroso. Me la apunto
ResponderEliminarQue pinta tan buena tiene este fiambre, yo también lo vi en el blog de ana y me encanto, ósea que también lo probare.
ResponderEliminarEl bríoche bañado en naranja también me ha encantado y también me lo apunto, este fin de semana me parece que voy a tener mucha receta que hacer.
Besos crisylaura.