Carrusel

miércoles, 5 de abril de 2017

Tortillas de patata con chirlas (almejas)


Ya estamos en primavera, aunque muchos de vosotros estaréis de acuerdo conmigo cuando digo que solo se nota en el calendario y en el cambio de hora, porque si nos fijamos en el tiempo, más parece que estemos en invierno que en época de que la sangre se nos altere. Estos días tan desapacibles hacen que me resista a pasarme a los platos fríos y me apetecen otros, como el que os traigo hoy que, aunque no es estrictamente de cuchara, sirven para atemperar el cuerpo. Es un plato que a mucha gente sorprenderá, no solo por la combinación de ingredientes, sino por lo buenísimo que está.  Además, es sencillo y os puede servir como un primer plato o bien como un aperitivo caliente y, por si fuese poco, rápido y barato.

Ingredientes para 8 tortillas pequeñas o una mediana:
  • 500g de patatas peladas.
  • 400g de chirlas.
  • 2 o 3 huevos grandes.
  • 3 dientes de ajo.
  • 1 ramito de perejil.
  • 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
  • Sal.

Realización:

1º.- Lavamos bien las chirlas y las cubrimos con agua con una cucharada sopera de sal. Las dejamos reposar en un sitio fresco durante tres o cuatro horas para que las chirlas expulsen la posible arena que tengan dentro.



2º.-  Pasadas las tres o cuatro horas, volvemos a lavar bien las chirlas, eliminamos aquellas que estén abiertas y colocamos las restantes en una cacerola.

3º.- Añadimos agua a la cacerola hasta cubrir las chirlas. Agregamos un par de cucharadas de aceite de oliva y las colocamos al fuego hasta que se abran. Las dejamos enfriar, procurando que todos los cuerpos de las chirlas queden cubiertas de caldo.




4º.- Mientras se enfrían las chirlas, pelamos y cortamos las patatas en pedazos pequeños para tortilla.



5º.-  En una sartén mediana, ponemos 4 cucharadas de aceite de oliva virgen y un diente de ajo sin pelar y con un corte para que suelte el sabor.



6º.- Cuando esté caliente el aceite, añadimos las patatas partidas y bien escurridas. Ponemos un poquito de sal y las freímos hasta que estén ligeramente doradas.




7º.- Las apartamos y las ponemos en un escurridor para quitarles el exceso de aceite. No tiramos el aceite.



8º.- Una vez frías las chirlas, separamos los cuerpos de las conchas y los reservamos. Dejamos unas cuantas enteras para luego decorar el plato.


9º.- Colamos el caldo con un colador de tela para retener la posible arena que haya quedado. Reservamos el caldo.



10º.- Ponemos a calentar el horno a 220ºC.

11º.- Batimos los huevos con un poquito de sal.




12º.- Incorporamos las patatas fritas escurridas y las empapamos bien con el huevo batido.



13º.- Untamos muy bien con aceite de oliva unos moldes de magdalenas o muffins y, con la ayuda de una cuchara, rellenamos los moldes hasta una altura de un dedo o dedo y medio, no más.



14º.- Metemos los moldes en el horno caliente y dejamos hasta que estén cuajadas las tortillas. No hace falta que se hagan demasiado.

15º.- Picamos bien los dos dientes de ajo y el ramito de perejil.





16º.- Sacamos del horno las tortillas y, con cuidado de no quemarnos, las desmoldamos. Si se pegan un poco, nos ayudamos de una cucharilla, pasándola por los bordes e introduciéndola por la parte de abajo.



17º.- En una sartén mediana, ponemos dos o tres cucharadas soperas del aceite de escurrir las patatas y doramos un poco las tortillas por los dos lados. Las apartamos.



18º.- En el aceite sobrante y a fuego flojo, sofreímos durante unos 30 segundos los ajos y el perejil picados (cuidado de que no se doren los ajos).



19º.- Incorporamos el caldo colado de las chirlas, los cuerpos y las tortillas. Dejamos reducir el caldo y, mientras esto ocurre, damos la vuelta a las tortillas para que se empapen de caldo por los dos lados. Debe quedar solo el líquido suficiente para poner un par o tres de cucharaditas de postre en cada plato.





20º.- Emplatamos: ponemos dos tortillas por plato, repartimos la salsa por encima y colocamos unas chirlas con concha (de las que teníamos reservadas). Finalmente ponemos un chorrito de aceite de oliva virgen extra por encima y a la mesa.



21º.- Servimos caliente.





Variaciones y sugerencias:

  • Podéis utilizar otro tipo de almeja, aunque os recomiendo la chirla porque el sabor es especial y la combinación con el ajo,  el perejil y patata es espectacular.
  • Si no tenéis tiempo para hacer tortillas pequeñas o no disponéis de un molde para ello, haced una sola de mayor tamaño y la cortáis en pedazos o tacos más o menos grandes antes de incorporarla al caldo o después. Si os decantáis por esta última opción, pinchad suavemente la tortilla por debajo para que empape el caldo.
  • Si hacéis las tortillas en moldes de magdalenas o muffins, untadlos muy bien con aceite o mantequilla para que no se peguen.
  • Otra forma de hacer las tortillas es utilizando un molde pequeño de emplatar bien untado en aceite o mantequilla y una sartén. Para ello, debéis ir haciendo una a una, poniendo un par de cucharadas de la mezcla para la tortilla en el molde y, cuando haya cuajado por un lado, le dais la vuelta para hacerla por el otro lado. 
  • Si hacéis la receta para aperitivo, poned para cada persona, solo una tortilla,  añadid un poquito del caldo de la cocción y colocad un par de chirlas de decoración con unas gotitas de aceite de oliva virgen extra.
  • La patata es recomendable que sea un poco cremosas, es decir, para cocer, aunque cualquier tipo vale.
  • Si queréis que la receta vaya más rápida, podemos preparar el día anterior las chirlas y conservarlas en la nevera, cubiertas con el caldo. 
  • Si no podéis o no queréis tomar huevo, se puede hacer la receta solo con las patatas. Otro día os enseñaré la receta.
   

miércoles, 22 de febrero de 2017

Magdalenas de naranja con nueces y pepitas de chocolate



Hacía mucho tiempo que no publicaba una nueva entrada, pero no ha sido por falta de ganas. A veces la vida cotidiana nos depara situaciones que nos desvían de aquellas cosas que nos gustan, pero este fin de semana he tenido un hueco y aquí me tenéis a pie del cañón.
La receta que os traigo está elaborada con Thermomix©, sin embargo,  al final tenéis una adaptación de la misma para los que no dispongáis de este robot de cocina. Se trata de unas magdalenas muy esponjosas, tiernas y con un sabor a naranja y chocolate riquísimo. Además, al llevar azúcar moreno, no son muy dulces y tienen un ligero toque a caramelo. Estoy seguro de que os encantarán.


Ingredientes para unas 16 piezas pequeñas o 10 grandes:

  • 220g de harina de repostería.
  • 200g de azúcar moreno integral, más unas cucharadas para espolvorear.
  • 4 huevos grandes (L).
  • 1/2 naranja de zumo grande o una pequeña entera.
  • 200g de aceite de oliva suave.
  • 1 sobre de levadura química royal (16g).
  • 65g de nueces peladas y partidas en pedazos no muy pequeños.
  •  80g de pepitas de chocolate negro.

Realización:

1º.- Colocamos en el vaso de la Thermomix© los 200g de azúcar moreno integral, los 4 huevos y la naranja lavada, sin pelar, sin semillas y cortada en pedazos. Programamos la Thermomix© a 37 ºC durante 3 minutos y a velocidad 5.





2º.- Volvemos a programar la Thermomix©  3 minutos a velocidad 5, pero ahora sin temperatura.

3º.-Añadimos los 200g de aceite de oliva suave y programamos la  Thermomix© 15 segundos a velocidad 5.


4º.- En un bol tamizamos los 220g de harina de repostería y le añadimos el sobre de levadura química. Mezclamos bien con un tenedor.




5º.- Incorporamos la mezcla de harina y levadura al vaso de la Thermomix© y programamos 8 segundos a velocidad 6.

6º.- Vertemos la mezcla en un bol e incorporamos la mitad de nueces picadas y la mitad de las pepitas de chocolate negro. Removemos todo con una espátula.




7º.- Rellenamos los moldes hasta 3/4 de su capacidad, o un poco más, y los colocamos en moldes rígidos para magdalenas para que cuando se metan en el horno crezcan hacia arriba y no a lo ancho.


8º.- Dejamos reposar los moldes rellenos en la nevera durante una hora aproximadamente.

9º.- Sacamos las magdalenas de la nevera y repartimos por encima el resto de las nueces y pepitas de chocolate. 



10º.- Espolvoreamos un poco de azúcar moreno por encima de cada magdalena.


11º.- Precalentamos el horno a 250ºC arriba y abajo. Metemos las magdalenas, bajamos la temperatura a 220ºC y las cocemos hasta que al pincharlas con un palillo, salga limpio. Tardan unos 15 minutos, aunque el tiempo depende del tamaño de las magdalenas.

12.- Sacamos las magdalenas del horno y, con cuidado de no quemarnos, las extraemos de los moldes rígidos y las dejamos enfriar sobre una rejilla.




Adaptación: Sin Thermomix © :

1º.- Colocamos en el vaso de la batidora o picadora  los 200g de azúcar moreno integral, los 4 huevos y la naranja (lavada, sin pelar y sin semillas) cortada en pedazos y picamos todo muy bien hasta que no se noten los trocitos de  naranja.

2º.-Añadimos el aceite de oliva suave y volvemos a batir durante 1 minuto.

3º.- En un bol tamizamos los 220g de harina de repostería y le añadimos el sobre de levadura química. Mezclamos bien con un tenedor.

5º.- Incorporamos la mezcla de harina y levadura al vaso de la batidora y batimos hasta que la mezcla esté homogénea.
El resto de los pasos es igual.



Variaciones y sugerencias:
  • En vez de azúcar normal podéis utilizar azúcar blanco o panela.
  • Podéis sustituir las nueces por otro fruto seco como avellanas, pistachos, almendras, piñones, etc.
  • Las pepitas pueden ser de chocolate con leche o blanco, o no ponerlas.
  • Congelan muy bien metidas en una bolsa o recipiente de plástico.

domingo, 8 de enero de 2017

Timbal de pota y langostinos con crujiente de kikos


Las Navidades se han acabado y hay que volver a ponerse el delantal, pero bueno, como se suele decir, "palos a gusto no duelen".
Para empezar este nuevo año, os traigo una receta que realmente no es mía porque me la enseñó Pablo Margós, mi amigo y fabuloso chef del restaurante-arrocería Las Bairetas de Chiva (Valencia), aunque yo le he hecho alguna modificación, no porque le hiciera falta, sino por intentar hacerla mía. La receta es un clásico en el restaurante; se mantiene en carta prácticamente desde que inauguró. Por ello, desde aquí, le doy las gracias y estoy seguro que si la probáis también se las daréis vosotros.
Es una receta muy sencilla, sabrosa , que podemos tener preparada con antelación y que no desmerece en ninguna ocasión.




Ingredientes para 6 personas:

  • 200g de pota.
  • 185g de langostinos cocidos.
  • 2 patatas medianas (370g)
  • 1 huevo.
  • 2 dientes de ajo.
  • Un puñado pequeño de kikos.
  • 250ml de aceite de girasol o soja.
  • Chorrito de aceite  de oliva virgen extra.
  • Sal.
 Realización:

1º.- Comenzamos la receta la tarde de antes de hacer el plato porque los ingredientes deben estar fríos (puntos 1º y 2º). 
Cocemos los 200g de pota en una cacerola con agua y un poco de sal durante unos 6 o 8 minutos (o hasta que al clavarle un cuchillo se deslice fácilmente).




2º.- En otra cacerola ponemos agua y un poco de sal y cocemos las patatas lavadas (sin pelar) durante unos 20 minutos.



3º.- Una vez cocidas la pota y las patatas, escurrimos el agua y dejamos enfriar. Después las dejamos toda la noche en el frigorífico.

4º.- Al día siguiente, quitamos la piel que cubre la pota (así estará más tierna) y la cortamos en pedacitos como para ensaladilla rusa . Reservamos.




5º.- Pelamos los langostinos, les quitamos el intestino (cordón negro que tienen en el dorso), los cortamos en pedacitos y los reservamos.





6º.- Pelamos las patatas cocidas y las rallamos con un rallador grueso (de los de agujeros grandes) y reservamos.



7º.- Ponemos en el vaso de la batidora el huevo (para que no se corte el ajoaceite el huevo debe estar a temperatura ambiente)los dos dientes de ajo pelados y cortados en pedazos, los 250ml de aceite de girasol o soja y media cucharita de café de sal. Batimos hasta obtener un ajoaceite suave: Metemos el brazo de la batidora hasta el fondo del vaso y batimos, sin moverlo, hasta que oigamos que cambia de sonido, momento en el que podemos subir y bajar la batidora hasta que esté todo bien cuajado.






8º.- Ponemos en un bol amplio las patatas ralladas, la pota, los langostinos, añadimos el ajoaceite y mezclamos bien todo.


9º.- Emplatamos la mezcla con la ayuda de un molde, cubrimos con los kikos ligeramente picados y añadimos un chorrito de aceite de oliva virgen extra.


Variaciones y sugerencias:
  • Se hace con pota, una especie de calamar gigante que se vende en las pescaderías en forma de pedazos. Se podría hacer con sepia o calamar normal, pero la textura y el sabor de la pota son ideales para este plato.
  • La receta original no lleva ni langostinos ni kikos, podéis probarlo así; también os encantará.
  • Lo podéis preparar con antelación y mantenerlo en el frigorífico bien tapado.
  • Lo podéis servir con láminas de pan tostado, rosquilletas, etc.
  • Aunque parezca que el ajo hará el plato picante, no es así, aunque si os gusta picante podéis añadirle un poco más de ajo.
  • Es muy importante que tanto la pota como las patatas estén frías porque si lo intentamos hacer en caliente, no podremos rallar las patatas y la pota quedará hecha un amasijo.
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